Este espacio se ha abierto a partir del 3 de mayo de 2011, con el propósito de registrar en un solo lugar aquellos pensamientos, reflexiones, interacciones, comunicaciones internas, palabras, frases y todos las demás formas de estampar en blanco y negro lo que se piensa y se puede decir, pero también aquello que se piensa, se puede decir y se puede escribir.
Para todos aquellos poetas anónimos que deseen expresarse, tienen un lugar donde lo puedan hacer sin ninguna restricción, escribir por escribir las cosas que pensamos en un momento de inspiración, para que no se queden en la mente y para que al final no se pierdan en el olvido.
Campo Literario, surge como una inquietud y una necesidad de colocar en un lugar visible los pensamientos que por momentos queman nuestra alma, nos inundan el pecho de presión y nos explotan nuestras venas y arterias, procurando exteriorizarse para hacerse visibles a la luz del sol brillante y en la calidez del brillo de la luna llena.
domingo, 10 de julio de 2011
ROSA (Vivencias)
Estoy pensando en ti,
Yo te recuerdo ahora
A pesar del tiempo y la distancia
Tu recuerdo no se borra.
Que será de ti?
cuando veo una tarde esplendorosa
Mi mente va hacia ti
Dulce y querida rosa.
Tu tenías quince, y tenía dieciséis,
Amor de estudiante tuvo que ser.
Todo comenzó en el parque un atardecer
Y nuestra sencillez hizo estremecer
Me atrapaste con la dulzura de tu sonrisa
Me embelesaste con la inocencia de tu mirada.
Tu aliento era una suave brisa
Que me hizo caer ante ti sin decir nada.
Fuiste la primera flor que brotó
En el jardín de mis emociones
Fuí el benjamín que despertó
Tus primeras sensaciones
Fuiste la sutil mariposa que abrió
El volcán de mis pasiones
Fui el explorador que conquistó
Los íntimos secretos de tus excitaciones.
Fui el navegador que recorrió
La suave porcelana de tu piel
Y de tu euforia absorbió
Como una abeja tu dulce y virginal miel.
Me Deleité con la tersa carne de tus suaves labios.
Te alimentaste con el caudal de mis entrañas
El sol envidio nuestro ardiente agravio
Y la luna cómplice se hizo de nuestra hazaña.
Sin embargo algo nubló nuestro camino
Que no fue otro que el cruel destino
El cual deshojó sin benevolencia
Nuestro amor de adolescencia
Sin quererlo tú, sin quererlo yo, el destino nos lo imponía,
Que tomáramos caminos diferentes.
Pues éramos todavía
de nuestros padres dependientes.
Estoy pensando en ti
Yo te recuerdo ahora
A pesar del tiempo y la distancia
Tu recuerdo no se borra.
Que será de ti?
Cuando veo una tarde esplendorosa
Mi mente va hacia ti
Dulce y querida rosa.
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Muy lindo poema
ResponderEliminarGracias por tu comentario gentil solinor55.
ResponderEliminarLa vida nos parece bella
cuando tienes alguien que te adora
y que deja profunda huella
cuando de nuestra vida se evapora.